MONTAR UN ESTUDIO Y NO MORIR EN EL INTENTO

Artículo publicado en tattooispain: revista TATTOOISPAIN N 4

    Llevamos un par de años pinchando cerdo, tatuando a colegas con más o menos suerte, incluso haciendo algún trabajito en algún Estudio…, y por fin llega el momento de la gran decisión: ¿me pongo por mi cuenta?, y este es el instante en el que la realidad nos da un golpe y nos damos de bruces con un problemón: el papeleo y los trámites administrativos.

    Lo primero que debemos preguntarnos es: ¿exige algún requisito especial mi negocio?: para hostelería hay que tener el carnet de manipulador de alimentos, para ser dentista estudios de odontología… ¿y para abrir un Estudio de tatuajes? Ninguno más allá de tener el higiénico sanitario y las vacunas al día, la falta de regulación en este sector (por ejemplo unos estudios oficiales) hace que sea un puerta abierta para que cualquier cabeza hueca se compre una máquina por internet y se ponga a desprestigiar el sector, como desgraciadamente ya está ocurriendo, antes de la era de internet aquel que no conocía a un tatuador no tenía posibilidades de entrar en este negocio, pero hoy en día es prácticamente imposible frenar la avalancha de gente con “vocación artística”, y la postura del “secretismo” profesional no ayuda demasiado, allí donde vamos se ven supuestas academias y ofertas de cursos, con contenidos de lo más diverso, y mientras unos callan otros se forran, lo que derivará inevitablemente en una intervención por parte del Gobierno, y en que sean ellos quienes decidan unilateralmente como deben ser los requisitos y cual el contenido de los “estudios” de tatuaje.

El segundo paso es: ¿qué forma le voy a dar a mi Estudio?, es decir si voy a ser autónomo o una sociedad (limitada o anónima) decidirse por una forma u otra es importantísimo, mi consejo es “ponte siempre en lo peor”  , si tengo que cerrar ¿qué me ocurrirá si soy autónomo? ¿y si soy socio?. Económicamente la mayoría de emprendedores tiran hacia autónomos, ya que  no hay que pagar a notarios, ni depositar ninguna cantidad en entidades bancarias, ni redactar estatutos…ahora bien en caso de que finalmente tengas que echar la persiana por las malas y queden deudas pendientes, el autónomo responde con todos sus bienes presentes y futuros, para pensárselo por lo menos. Como la inmensa mayoría opta por autónomos es lo que vamos a desarrollar:

1. Tengo que darme de alta en el IAE-impuesto de actividades económicas-, para ello hay que elegir un código/epígrafe de los que nos ofrecen y que describe la actividad que vamos a desarrollar, ¿qué epígrafe es el nuestro? Ninguno, no constamos como actividad empresarial. No nos queda más remedio que buscar uno “parecido”, que en este caso será “Salones de peluquería e Institutos de Belleza”. Esta tasa es municipal por lo que los trámites los podemos hacer en nuestro Ayuntamiento o directamente en Hacienda.
2. Darnos de alta en el censo –modelo 036- este trámite es gratuito, lo más importante de este paso es que elegimos una opción de tributación para  el IVA y el IRPF, creo que todos habremos oído hablar de los “módulos” en autónomos, elegir correctamente una opción u otra de tributación podrá hacernos ahorrar un montón de dinero en impuestos futuros. Se realiza en Hacienda.

3. Darnos de Alta en el régimen especial de autónomos de la Seguridad Social, este trámite se realiza ante una Tesorería de la Seguridad Social, lo más peculiar es que en este momento tenemos que adherirnos a una Mutua, en caso de accidente laboral o enfermedad será esta la que nos pague la baja.

Parecen pasos muy complicados, pero la verdad es que en un par de mañanas lo tendremos listo.

El tercer paso hace referencia al local.- necesitamos una licencia de apertura (de 300 a 900 euros), acondicionar el local de acuerdo a los requisitos higiénico sanitarios ya vistos en artículos anteriores, en su caso, licencia de obras (es un porcentaje del presupuesto de las obras), y licencia de apertura.

Este paso suponiendo que tenemos local alquilado o en propiedad, qué deberíamos tener en cuenta a la hora de firmar un contrato de alquiler es otra historia.

Cuarto y último paso.- requisitos que son obligatorios para toda  actividad,  obligatoriamente tengo que tener un  seguro de  responsabilidad civil (respecto a este seguro creo que la UNTAP ofrece a sus asociados unos específicos), tener hojas de reclamaciones autorizadas…

La conclusión a que llegamos es que no es fácil montar un negocio de ninguna clase, pero en nuestro sector yo añadiría una dificultad añadida, no hay una organización adecuada que presione para, por ejemplo, tener un grupo de asesorías o gestorías especializadas, aseguradoras que conozcan la problemática de nuestro trabajo (reclamaciones de clientes por alergias, porque no han quedado satisfechos con el trabajo…), o para evitar que cualquiera sin ninguna clase de formación habrá un negocio de esta clase. Para la Administración no existimos para lo bueno: reconocer derechos.., pero sí para lo malo: pagar impuestos

Queda mucho trabajo por hacer, hay que superar antiguas barreras, de uno en uno somos ,esos “pintarrajeados” que entramos en Hacienda a pedir papeles para nuestro estudio, si nos organizamos nos llamaran “Señores pintarrajeados”, podemos estar en contra del juego, pero no nos engañemos, ya somos jugadores.